En mayo de ese año la Federación Internacional de estadísticas e historia de fútbol (IFFHS) lo posiciona en el primer lugar del ranking mundial de clubes, siendo el primer equipo argentino en lograr esa distinción. Sin embargo, lo que los agricultores no sabían era que el cultivo sin pesticidas ni fertilizantes fósiles produce en promedio un 28 por ciento menos de rendimiento que el cultivo de algodón convencional; que las semillas de algodón orgánico producen fibras de menor calidad y más cortas; y que, cada vez más, las marcas estaban utilizando su poder de mercado para negociar el precio del algodón orgánico hasta igualarlo con el precio del algodón convencional o incluso más barato debido a su menor calidad.